Tengo y Aomame son dos personajes maravillosos, que te convierten sin remedio en su compañero de aventuras, inquietudes, luchas, dudas.... Te transmiten sus inseguridades y también sus seguridades, les quieres en sus fraudes y en sus asesinatos! Si, porque son personajes marcados por una infancia llena de soledades y ausencias que les ha convertido en lo que son, en héroes que se toman la justicia por su mano y que se sienten confundidos. Todo ello en un Japón moderno, en 1984 o en 2011, da igual, en un mundo orwelliano, lleno de hechos predeterminados, dominado por sectas religiosas, por corrupciones literarias y por el maltrato a las mujeres (tema tan de moda por parte de escritores hombres, en estos últimos años) pero en una realidad que se mueve, que ofrece dos lunas, dos prismas, distintas perspectivas...
Violencia terrible, justicia en cuestión, la sensación de que hay un destino que mueve los hilos...
... y mientras sigo leyendo... una canción para este libro, una canción intimista que mezcla la tristeza y la esperanza... Adele en Someone like you
maravillosa canción... espero probar las magdalenas con "tres chorritos de leche"....
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